PEREGRINOS EN EL MUNDO

 

 

 

        Para comenzar, un haiku (canto breve de eterno eco); que dice:

 

Encantamiento:

junto al estanque azul,

lirios de agua.

 

 

Queridos amigos, ¡Buenas noches!: con fragancia de calas (también conocidas como alcatraces, aro de Etiopía, flor del jarro o lirios de agua; entre otros), y que expresan pureza, simpatía, belleza o reconocimiento. En su época gloriosa, los griegos y los romanos  asociaban a las calas con las fiestas y el disfrute por su semejanza con una copa para beber. En algunas culturas, las calas blancas son mensajeras de buena suerte y la vinculan con la eterna juventud. ¡Respiremos con hondura sus fragancias!

 

Somos peregrinos: estamos en esta vida mortal de paso para la eterna. El silencio y el cansancio del peregrino se transforman en un bello y alegre canto de esperanza para quienes la vida es un camino y el ejercicio de su vocación, de su noble vocación, a título personal o dentro de un colectivo colegiado,  es posada en el camino. Al respecto, conviene tener claro la diferencia entre trabajo, misión y vocación: el trabajo es esa labor que realizamos por el solo hecho de obtener una remuneración para nuestro sustento; la misión es un trabajo, una labor que realizamos con la única finalidad del sustento, pero con la conciencia de que es útil para la sociedad en la que vivimos; y la vocación es una misión que satisface plenamente nuestros sentimiento de querer hacer algo bueno, de colaborar en la consecución de un mundo mejor (la vocación se vive cuando nos sentimos tan a gusto en el desarrollo de nuestra misión que llegamos a pensar: “Y además me pagan”).

 

 Entre los actores del bello canto de esperanza, se encuentran, brillando con luz propia, los artistas y colectivo artístico premiados esta noche (Don Miguel González Mariño – MICHELO-, pintor, engalana la sala en la que nos encontramos con fantásticos cuadro de su obra pictórica; Don Fernando Pérez Gómez - DORIAN QOUD- escritor y poeta; Doña. ISABEL MORIÓN LÓPEZ, escritora y poeta; y la empresa “ AMIAY –ARTE Y MODA-”); así como las personalidades que hacen entrega del galardón correspondiente (Doña Aurora Bravo, pintora consagrada; y Doña Soledad Martínez, actriz, escritora y poeta); y todos los presentes, visibles e invisibles, pues,  no olvidemos que: “No sólo es artista el que crea  obras de arte, sino todo aquel que lo vive”; a todos ellos, mi cordial felicitación. Y mi más profunda gratitud a las personas que dan vida a la Asociación de Artistas, Creadores y Escritores en Defensa de los Derechos Humanos; especialmente, a su vicepresidenta Doña. María Manuela (Mayla de Barbeito). Asociación sin ánimo de lucro que organiza estas hermosas veladas, con una doble finalidad: el reconocimiento de los méritos y bondades de las personas premiadas y el estímulo en su búsqueda de la belleza (“El arte es un encuentro con la belleza”); y el carácter benéfico de las mismas, que se concreta en una rifa de objetos donados por personas generosas, cuya recaudación se entrega, íntegramente, a una entidad religiosa en beneficio de los más necesitados. A esta doble finalidad cabe añadir el deseo de que sean vividas con un espíritu festivo en un amor fraternal. Me siento muy honrado con la Invitación de Honor que se me ha conferido.

 

Y para terminar un breve poema que dice:

 

Nunca vi a Dios,

pero existen criaturas tan hermosas

que sólo Dios pudo crearlas.

 

¡Muchas gracias! Sé felices: “El Amor es el Camino”.                                                                                                                                                                                                                    

                                                                                                                                                                                     

                                                                  Madrid, 31 de mayo de 2022

                                                                          MANUEL CAMACHO