O me quieres o me olvidas;
en el amor...,
no valen las medias tintas.
Si se apaga la luz de tu mirada,
no me mires;
si se rompe tu copa del deseo,
no me invites;
si se reseca el jugo de tus labios,
no me beses...
Y si por no mirarme,
por no invitarme,
por no besarme...;
se callan los latidos de mi pecho,
no me llores.
Prefiero que me maten los olvidos
a vivir en la angustia
de un amor tibio.
M. CAMACHO