Mi infancia son recuerdos de un pueblo en la Axarquía; mi vida, la ilusión por un mundo mejor... Si compartes esta ilusión, aquí tienes un espacio para sembrar la esperanza.
ESTRELLA QUE ILUMINA SENDEROS DE PAZ
A Olivia, de sus abuelos
Aurelia y Manuel,
con todo nuestro amor.
Cada once de julio,
en mi pecho late
el dulce recuerdo
de tu nacimiento.
¡Feliz cumpleaños!,
querida Olivia.
Para celebrarlo,
una rica tarta
debes compartir
con todos aquellos
que desean, hoy
y todos los días
de una larga vida,
que seas feliz.
Sopla las velitas
con mucha ilusión;
pero no te olvidas,
antes de soplar,
que en un buen deseo
tú debes pensar;
pídele a Jesús,
el hijo de Dios,
que guíe tus pasos
por un buen camino,
que siembre en tu pecho
la flor del amor,
que llene tu vida
de luz y alegría,
que nunca te falte
la fe y la esperanza
de aquellos que esperan
un mundo mejor.
En ese sentido;
acabo el poema
con unos consejos,
consejos de abuelo,
consejos de amor...
LOS CONSEJOS DEL ABUELO, PARA OLIVIA
í Sé una niña buena: no hagas daño a nadie ni a nada; y si, sin querer, lo hicieras, cuéntaselo a mamá y a papá para que te ayuden a corregir la falta.
í Ayuda en casa; aprenderás a hacer cosas interesantes, y te sentirás gratificada.
í Estudia, pinta, lee, escribe, toca algún instrumento musical, practica algún deporte; para ser bella y hermosa.
í Juega, canta, baila, sonríe...; reparte alegría allí donde estés.
í Comparte los juguetes más queridos: compartir lo que te gusta es un acto de amor.
í Si tienes que llorar, llora; pero llora con esperanza: pensando en el arco iris que se forma después de la lluvia al salir el sol.
í Quiere mucho a tu mamá, a tu papá, a tus hermanos, a tus abuelos, a toda tu familia y tus amigos; ellos siempre estarán a tu lado.
í Respeta a la naturaleza: a los animales, a las plantas...; a todas las cosas creadas por Dios.
í Dios quiere que todos sus hijos sean felices: sé feliz en tu camino...
Málaga, 11 de julio de 2021
MANUEL CAMACHO
Con amor eterno.
SOFÍA (FUENTE DE SABIDURÍA)
A Sofía, de sus abuelos
Aurelia y Manuel;
con todo nuestro amor.
Querida Sofía:
vuela el tiempo
con alas de mariposa;
y desde el jardín dorado
de las siete primaveras
que cumples en este día,
veintitrés de junio
de dos mil veintiuno,
llegan tus dulces aromas
(aromas a hierbabuena
que me regalan el alma
y me colman de alegría).
Sé feliz en este día,
día de tu cumpleaños,
y todos los días
de todos los años
de una larga vida.
Que nada te inquiete;
que nada te turbe;
que nada te aparte
del rumbo correcto,
el rumbo que siguen
los hijos de Dios:
que es rumbo de luz,
que es rumbo de amor.
Vuela, mi amor, vuela alto;
nunca dejes de volar:
aunque los humos te cieguen,
aunque el cielo esté nublado,
aunque la lluvia te moje,
aunque el viento sople fuerte,
aunque las alas te duelan,
aunque te fallen las fuerzas...;
los campeones son personas normales
que no tiran la toalla.
Piensa que nunca sola estarás;
que aunque verme no me veas,
siempre a tu lado estaré;
para recordarte mis consejos,
los consejos del abuelo,
y protegerte del mal.
Vuela, mi amor, vuela alto;
sé muy feliz en el vuelo;
nunca dejes de volar...
EPÍLOGO (LOS CONSEJOS DEL ABUELO)
Ø Las nubes ocultan el sol para todos aquellos que no vuelan alto.
Ø Si deseas ser feliz, has de ser buena persona: Las buenas personas no nacen, se hacen haciendo labores buenas.
Ø Cuando la bondad acaricia el alma, se libera el genio de la sabiduría.
Ø Todos los seres buenos son portadores de algún mensaje divino, ¡escúchalos!: escuchar con cariño es amar con el oído.
Ø Llena tu mente de buenos pensamientos si quieres que tus manos se llenen de buenas obras.
Ø Estamos en el mundo para ser felices; Dios nos juzgará por los momentos de felicidad perdidos: aquellos que pudimos ser felices y no lo fuimos.
Ø Hacer lo correcto, es invertir en felicidad: la felicidad no consiste en hacer lo que te gusta; sino en hacer aquello que debes hacer, y conseguir que te guste lo que haces.
Ø La virtud es una conquista; el vicio, una rendición.
Ø Las personas virtuosas no se lamentan de las adversidades; intentan sacar, de todas ellas, una enseñanza.
Ø Los defectos se convierten en grandes virtudes cuando luchamos por corregirlos.
Ø Quien no se perdona, muere en pecado.
Ø La vida es un encuentro con el amor: vivimos como amamos. Ama con los cinco sentidos.
MANUEL CAMACHO
AMIGOS DEL ARTE
(PREMIOS JUNIO 2021)
Buenas noches, queridos amigos, amigos del arte: del arte, que es un encuentro con la belleza; de la belleza, que es la flor del amor; del amor, que es la esencia de la vida.
El artista es un espejo
que refleja el esplendor
que desprende la belleza.
Pero no sólo son artistas los que hacen arte, sino todos aquellos que lo viven: los amantes de la belleza.
Mi felicitación a los galardonados; y mi gratitud a todos los presente, visibles e invisibles, por su generosidad y amor a la belleza (de modo especial a Mayla, que es el alma de este acto): que Dios nos bendiga.
El poema que voy a leeros es una reflexión sobre la envidia, que es la ceniza del amor; y lo hago con el deseo de que nunca jamás nos coma, porque la envidia es una perversidad doblemente dañina: por el bien perdido, que es el amor quemado; y por el mal hallado, que corroe el alma. Su título, “El gusano de la envidia”; me lo inspiro un hermoso poema que escuché, y del cual no he logrado encontrar ni el título ni el autor. El poema, mi poema, dice así:
-EL ENVIDIOSO:
¿Por qué, si no tienes alas,
vuelas más alto que yo?
¿Por qué si, cuanto tú tienes,
yo te lo puedo quitar?
Quiero tu risa y tu llanto,
quiero tu pozo y tu sed,
quiero tu fruto y tu hambre,
quiero tu sol y tu sombra,
quiero tu ajenjo y tu miel,
tu mentira y tu verdad...
Quiero todo lo que tienes;
y, cuando encuentre el momento,
que no dejo de buscar,
tendré todo cuanto tienes,
mientras tú nada tendrás.
¿Qué tienes, que yo no tenga,
si todo lo que tú tienes
yo te lo puedo quitar?
-EL ENVIDIADO:
La envidia ciega tu mente,
vives en la oscuridad;
en un agujero negro,
en una fatalidad.
Tengo sueños y esperanza,
tengo amor y dignidad;
son flores de mi jardín
que no podrás arrancar;
y al quedarte sin sustento,
al no poderme dañar;
el gusano de la envidia
tu vida se comerá.
Sed felices, queridos amigos.
M. Camacho